¿Cómo hacerlo?
Al igual que cada joya que compramos necesita unos cuidados adecuados y especiales para conservar su belleza y mantener su aspecto original el mayor tiempo posible, los relojes no son ninguna excepción - también necesitan mucha atención para su mantenimiento, no sólo para su uso. Le ofrecemos unos cuantos consejos sobre cómo mantener su reloj en las mejores condiciones óptimas para que pueda disfrutar de él durante el mayor tiempo posible.
Limpieza de la superficie de los relojes
Si desea prolongar al máximo la vida útil de su reloj, es importante que, en primer lugar, lo mantenga siempre limpio. Otra parte fundamental del cuidado de los relojes es, por supuesto, la visita periódica de un relojero profesional, donde podrá someter su reloj a una revisión especializada con un ojo profesional.
Para la limpieza de la superficie del reloj siempre debe utilizar un pañito suave. En caso de las micro-partículas finas, como el polvo, basta limpiar su reloj con un pañito seco. Para la suciedad más difícil, utilice un paño empapado con agua jabonosa. Después de utilizar un paño con agua jabonosa, el reloj debe limpiarse siempre con un paño humedecido con agua limpia o enjuagarse y secarse suavemente para evitar dejar una película jabonosa en la superficie que pueda degradar el material del reloj. Es importante mantener la superficie del reloj limpia, ya que las partículas finas pueden penetrar en su interior. Limpiar el polvo y las partículas pequeñas es cuestión de minutos, pero ayudará en gran medida a proteger su reloj favorito.
Resistencia al agua en los relojes
Con cada reloj deben respetarse los parámetros de resistencia al agua. Si tiene un reloj que no es resistente al agua, limpie siempre la caja con un pañito seco. Para su correa puede utilizar un pañito empapado con agua jabonosa.
Si usted es propietario de un reloj resistente a la humedad y al agua, no tiene que preocuparse de utilizar un tejido humedecido limpiando su caja o la correa. Sin embargo, lo ideal es pulirlos con un paño seco después de limpiarlos.
Con los relojes resistentes al agua, es importante mantener siempre la corona bien apretada (hacia dentro) cuando estén en contacto con el agua y no manipular nunca los pulsadores o la corona bajo el agua.
Los golpes fuertes, así como los cambios bruscos de temperatura, pueden debilitar la resistencia al agua del reloj o afectar sus otros componentes (corona, botones). Las juntas del reloj se desgastan con el tiempo. Debido a estos factores, es recomendable que un relojero revise la resistencia al agua de su reloj cada 12-18 meses. Además, debe realizarse una prueba de resistencia al agua cada vez que se abra el reloj.
Parámetros de resistencia al agua:
30 metros / 3 ATM - resistentes a la humedad - adecuados cuando el agua los salpica o corre por ellos - lavado de manos, lluvia
50 metros / 5 ATM - adecuados cuando no están expuestos al agua con mucha presión - lavado de manos, lluvia, ducha, natación en superficie
100 metros / 10 ATM - adecuados cuando sólo están expuestos a una presión de agua moderada - lavado de manos, lluvia, ducha, natación, buceo en superficie
200 metros / 20 ATM - adecuados también cuando se exponen a presión de agua: lavado de manos, lluvia, ducha, natación, buceo en superficie, deportes acuáticos recreativos normales, buceo sin aparato respiratorio (de oxígeno).
Más de 200 metros - adecuados para todo tipo de deportes acuáticos, buceo con aparato respiratorio (de oxígeno), siempre llevan la indicación: "de buceo".
Influencias externas
Hay muchos factores externos que, sin duda, afectan el material de un reloj o su calidad. Entre ellos se encuentran la acidez de la piel, el sudor, la exposición a productos químicos y cosméticos, pero también la influencia de las condiciones climáticas. Nunca exponga su reloj a productos químicos, gases o disolventes. No aplique nunca los productos cosméticos o perfumes directamente sobre la caja y la correa del reloj. Evite los cambios bruscos de temperatura, los cambios de humedad, los campos magnéticos fuertes, no exponga el reloj a la luz solar prolongada, el reloj no debe exponerse a lugares calientes o muy fríos durante largos períodos de tiempo.
Cuando lleva su reloj en agua salada o mineralizada, después de su uso, enjuáguelo siempre con agua limpia y séquelo. Si su reloj tiene un bisel giratorio, gírelo al lavarlo para eliminar suciedad como arena o sal marina cristalizada.
Guarde siempre su reloj en un lugar seco y seguro.
Cuidado de las correas
Si tiene en planes utilizar el reloj en el agua o sufre de sudoración excesiva, evite las correas de cuero. El cuero y el agua no son grandes amigos, por lo que en este caso las correas de acero o caucho son más preferibles.
La vida útil de las correas de cuero en condiciones de uso normal durará aproximadamente un año, año y medio.
La elasticidad y el color del cuero se ven afectados principalmente por la humedad, la acidez de la piel, el sudor, los productos químicos, la luz solar y el nivel de desgaste.
Las correas se limpian con un pañito suave empapado en agua limpia o jabonosa, según la suciedad, y a continuación se deben secar. Las correas de cuero se limpian mejor con un pañito suave humedecido sólo en agua limpia. Después de limpiarlas, podemos tratarlas y subrayar su brillo con aceites naturales adecuados para el cuero.
Relojes de cuarzo
Encargue siempre la sustitución de la pila de su reloj a un relojero profesional y de confianza. Nunca intente cambiarla usted mismo en casa. La duración de una pila es de unos 24 meses. Sin embargo, la duración de la pila depende de varios factores, por ejemplo, si tiene un reloj con cronógrafo, éste consumirá más energía que un reloj sin cronógrafo. En caso de que la pila de su reloj deje de funcionar, es imprescindible retirarla lo antes posible, ya que si permanece demasiado tiempo dentro del reloj puede causar graves daños al mecanismo.
Relojes mecánicos
Este tipo de mecanismo de reloj requiere más atención que otros mecanismos. En el momento de querer darle cuerda a su reloj, siempre es mejor quitárselo de la muñeca. En este tipo de reloj, las revisiones periódicas deberían ser algo habitual, idealmente cada 3 o 5 años.
Es importante tener en cuenta que estos tipos de relojes son menos resistentes a los golpes y sacudidas y también tienen menos precisión que los que funcionan con la pila.
Los relojes mecánicos requieren que se les dé cuerda con regularidad, mientras que los automáticos deben mantenerse en funcionamiento mediante la actividad, llevándolos puestos. La reserva a plena cuerda es de 28 a 48 horas antes de que sea necesario darles cuerda o llevarlos puestos. Dé cuerda a su reloj a la misma hora todos los días. Nunca dé cuerda a un reloj mecánico después de haberse parado o de sentir resistencia en la corona.
Para simplificar el mantenimiento del mecanismo, lo ideal es obtener un enrollador de reloj especial para este tipo de relojes, tan llamado: winder.
Ajuste de la fecha y la hora
Ajustar la hora y la fecha en un reloj tiene sus propias reglas, aunque pueda parecer trivial, es una buena idea seguirlas.
No ajuste nunca la hora y la fecha de su reloj entre las 21.00 y las 3.00 horas. Este ajuste podría estropear gravemente el mecanismo del reloj.
Si tiene una esfera de fecha automática y clásica, después de un mes que tenga 30 días, deberá ajustar el primer día del mes manualmente. La esfera de la fecha siempre tiene 31 dígitos y, por lo tanto, el primer día del mes siguiente después de un mes de 30 días, tendrá la fecha 31 en su reloj.
Si la fecha de su reloj cambia a la siguiente durante el día, deberá retrasar el ajuste de la hora 12 horas. De esta forma, la fecha empezará a cambiarse de manera correcta.
Resumen
Es sumamente importante seguir los principios y normas recomendados a la hora de cuidar su reloj y prestar mucha atención a su cuidado periódico. Este tiempo le será devuelto en forma de disfrute del reloj, que podrá gozar durante muchos y largos años.